ESSLEMONT, IAN C.
La Guardia al fin llega a Quon Tali. Les mueve el juramento que hicieron cien años atrás: abanderar una oposición imperecedera a la existencia del Imperio. Pero incluso la materia que mantiene unida a la propia Guardia se resquebraja. Hay miembros de su élite, los juramentados, que anhelan un poder mucho mayor. Existen también entidades muy antiguas que buscan promover sus propios y arcanos fines.
Al tiempo que la Guardia Carmesí se prepara para librar una guerra, los generales y magos de Laseen, la vieja guardia, se impacientan ante lo que les parece una mala gestión del Imperio por parte de su emperatriz.