¿Os imagináis que el tipo más estrafalario del planeta tuviera que cuidar de vosotros durante un fin de semana? Me apuesto un ala a que se os helaría la sangre en las venas, tal y como nos sucedió a los hermanos Silver y a mí cuando nos enteramos de que el estrambótico tío Larry Silver se instalaba en Friday Street para hacernos de canguro? Pero, amigos, aquí no acaba la cosa: otra criatura todavía más espeluznante acababa de llegar a Fogville?